La palabra empoderar representa el acto de dar poder a alguien o a uno mismo. Cuando se trata de empoderamiento femenino, la expresión se refiere a una mayor participación social de las mujeres, que les permita acceder a todos sus derechos sin distinción.
En muchos lugares del mundo, las mujeres son el corazón de sus comunidades. Las investigaciones y estadísticas mundiales muestran que cuando se invierte en las mujeres, se obtiene el doble de beneficios para las familias, las comunidades y la sociedad en su conjunto.
Según ONU Mujeres, una entidad vinculada a la Organización de las Naciones Unidas, mientras más mujeres ingresen al mercado laboral y actúen sin diferenciación alguna con los hombres, más crecerán las economías.
Para la Fundación Juan Bautista Gutiérrez (FJBG), y sus líderes, entre ellos su Vicepresidente, Felipe Antonio Bosch, el empoderamiento económico de las mujeres constituye la ruta para muchas cosas positivas, siendo una de las más importantes, el acabar con el dilema nutricional.
Es así en tanto se desarrolle la auto sostenibilidad económica de la mujer, lo cual le permita generar sus propios ingresos dentro de la comunidad, respaldada por una buena alimentación para ella y su familia, con el fin de mejorar las condiciones de salud y educación de sus miembros.
La FJBG ha marcado el camino para lograr este objetivo a través de la implementación del Programa de Nutrición, cuyo eje número 3 es precisamente el empoderamiento económico de la mujer.
El Programa de Nutrición busca generar un impacto generacional, fomentando una nueva
forma de hacer las cosas en las comunidades guatemaltecas, y siguiendo los principios de la Seguridad Alimentaria y Nutricional.
Para lograrlo, uno de los objetivos esenciales del programa consiste en brindar a las mujeres las oportunidades para generar ingresos, a través de negocios incluyentes que estén vinculados a cadenas de exportación, que permitan mejorar su calidad de vida y nutricional, al crear comunidades auto-sostenibles.
De acuerdo con el modelo de intervención del programa, este se basa en tres ejes esenciales: Orientación para mejorar la alimentación, Acercamiento del alimento nutritivo a las familias y comunidades, y Empoderamiento económico de la mujer.
A través de este último se desarrollan alianzas estratégicas que permiten a las mujeres rurales emprender o formar parte de una empresa vinculada a cadenas de exportación. La clave para lograr estos resultados reside en la formación y la oportunidad. También, se ejercen acciones sostenibles de salud preventiva para mejorar la condición de madre-hija, familia y comunidad.
Trabajando para y junto a las mujeres, y gracias al consumo de Nutribien y otros acompañamientos, la FJBG hace un esfuerzo para que ellas tengan acceso a capacitación y a una mejor alimentación para sí y para sus hijos.
Esto les permite asumir los diversos retos que conlleva emprender. Al final, eso es justamente el empoderamiento femenino, el ayudar a las mujeres a tener acceso a sus derechos y encontrar las oportunidades para desarrollarse en el goce de los mismos.