Iniciar un emprendimiento exitoso es una tarea desafiante pero gratificante. Para la Fundación Juan Bautista Gutiérrez (FJBG) emprender es una de las formas de transformar las comunidades.
Y para su Vicepresidente, Felipe Antonio Bosch Gutiérrez, un empresario de éxito en sí mismo, la creación de negocios propios a nivel local es una de las maneras de alcanzar la superación de las mujeres, sus familias y sus comunidades. Por ello, dentro del Programa de Nutrición se plantean siete componentes para lograrlo que forman parte de la Fase de Emprendimiento.
Para comenzar cualquier negocio, es importante que los emprendedores tengan una mentalidad positiva y se preparen mentalmente para enfrentar los desafíos que se presenten. Esto implica desarrollar habilidades personales como la capacidad de liderazgo, la gestión del tiempo, la resolución de conflictos y la capacidad de adaptarse al cambio.
Para tener éxito en el mercado, los emprendedores deben buscar nuevas soluciones a los problemas existentes y crear un producto o servicio único y atractivo para los consumidores. Esto implica estar al tanto de las últimas tendencias del mercado y ser creativo al desarrollar nuevas ideas.
Es fundamental asegurarse de que el negocio cumpla con todas las leyes y regulaciones pertinentes. Esto implica establecer la estructura legal correcta y obtener las licencias y permisos necesarios antes de iniciar cualquier actividad comercial.
Para el éxito del negocio, los emprendedores deben asegurarse de tener un buen sistema de contabilidad y de gestión de inventario, así como de contar con un equipo confiable y eficiente para administrar el negocio. Esto implica tener un proceso establecido para la toma de decisiones, la planificación y la ejecución de tareas administrativas.
Atraer y retener a los clientes es clave para el éxito del negocio. Los emprendedores deben desarrollar una estrategia efectiva de marketing y publicidad para llegar a su público objetivo y diferenciarse de la competencia. Esto implica conocer a los clientes, comprender sus necesidades y desarrollar una marca sólida y reconocible.
Es fundamental garantizar que el producto o servicio se entregue de manera oportuna y eficiente. Los emprendedores deben contar con un proceso de producción bien establecido y con los recursos necesarios para cumplir con la demanda de los clientes. Esto implica tener un sistema eficiente para el control de calidad, la logística y la gestión de proveedores.
Es crucial para garantizar la sostenibilidad del negocio. Los emprendedores deben tener un plan financiero bien elaborado que incluya un presupuesto detallado, proyecciones de ingresos y gastos, y un plan de contingencia para enfrentar situaciones imprevistas.
La fundación sigue demostrando su compromiso con el emprendimiento y la promoción de la comunidad mediante el acompañamiento de sus programas que se enfocan en cada uno de estos componentes clave. Al seguir estos principios y tomar ventaja de los recursos disponibles, cualquier emprendedor puede iniciar y hacer crecer un negocio comunitario exitoso.